• Los trabajadores autónomos llevan más de 5 años esperando un sistema de protección justo con la modificación del cese de actividad y la puesta en marcha del subsidio para mayores de 52 años.

En el quinto aniversario del inicio del confinamiento debido a la pandemia del COVID-19, desde UPTA recordamos el profundo impacto que la crisis sanitaria tuvo sobre los trabajadores por cuenta propia en nuestro país. Según el Instituto Nacional de Estadística solo durante el año 2020, 311.259 negocios tuvieron que cerrar sus puertas, frente a los 278.525 negocios que nacían ese año, dejando un saldo negativo de menos 32.734 negocios en España, de los cuales más del 90% son negocios de entre 1 y 5 trabajadores.

Durante este periodo tan complejo, casi un millón y medio de trabajadores se benefició de la Prestación Extraordinaria por Cese de Actividad, una ayuda destinada a paliar el impacto económico derivado de la pandemia. Este cese de actividad se convirtió en el mayor sistema de protección frente a la crisis económica, permitiendo que miles de actividades económicas pudieran sobrevivir. Sin embargo, cinco años después y a pesar de las modificaciones introducidas por el Real Decreto Ley 13/2022 de 26 de julio, por el que se establece un nuevo sistema de cotización para los trabajadores por cuenta propia o autónomos y se mejora la protección por cese de actividad, sigue siendo complejo para el colectivo acceder a dicha protección, por lo que desde UPTA se viene demandando la necesidad de abordar las reformas necesarias para flexibilizar el acceso a la misma y mejorar la gestión de la prestación.

Desde la finalización del estado de alarma, UPTA ha subrayado en numerosas ocasiones la necesidad urgente de un sistema de protección social más robusto y adaptado a las realidades del colectivo autónomo, que se equipare al de los trabajadores asalariados.  Estas demandas aún no han encontrado respuesta, lo que deja a muchos autónomos sin las herramientas necesarias para hacer frente a futuras crisis o contingencias imprevistas en sus actividades económicas.

La propuesta de UPTA busca transformar el sistema de cese de actividad en un mecanismo más justo y accesible para los autónomos, garantizando su protección en momentos de necesidad, especialmente para aquellos que se quedan fuera del sistema de protección social sin opciones claras de reincorporarse al mercado laboral. En este contexto, UPTA exige con urgencia la puesta en marcha del subsidio para autónomos mayores de 52 años, una medida esencial para proteger a los trabajadores autónomos en situación de vulnerabilidad tras el cierre de sus negocios.

Eduardo Abad, presidente de UPTA, subraya que “cinco años después de la pandemia, los autónomos siguen careciendo de una protección social adecuada que permita afrontar futuras crisis. Es imprescindible que el Ministerio de Seguridad Social ponga en marcha la reforma del cese de actividad y que se transforme en un auténtico mecanismo de protección, asegurando que aquellos que se encuentran en una situación de vulnerabilidad no queden desprotegidos. Exigimos también al Ministerio de Trabajo que cumpla su compromiso y active de inmediato el subsidio para autónomos mayores de 52 años, una medida esencial para garantizar su inclusión en el sistema de protección social”.